NOTA DE OPINIÓN. Nosotros nos volvemos a oponer como ya lo hicimos cuando lo propuso el gobernador Scioli, y convocamos a oponernos porque partimos de la base que Insaurralde irresponsablemente vuelve a estigmatizar a la niñez y a la adolescencia en la provincia de Buenos Aires con un planteo efectista que no trata los temas de fondo que nos preocupan como sociedad.
El tema de la inseguridad en tal caso necesita de una propuesta integral y nacional sobre política de seguridad que de respuesta al delito que en estos tiempos tiene que ver con la extensión y la expansión que ha tomado el narcotráfico, la corrupción que promueve el narcotráfico, entre otros esquemas de delito vigentes hoy en la argentina. La respuesta tiene que ser nacional con su correspondiente incidencia en la provincia de Buenos Aires, y no respondiendo con parcialidades y con parcelamientos como son que cada provincia lo arregle por su lado, que cada ciudad lo arregle por su lado, porque vamos a llegar a que cada barrio lo arregle por su lado.
La irresponsabilidad de Insaurralde es hablar solamente de un universo de niños o jóvenes que entra en conflicto con la ley penal, que no llega a ser más del 4% del total de las investigaciones penales, y no habla de que la mayoría de niños, adolescentes y jóvenes que están en situación de desigualad y pobreza es posible que en los próximos tiempos si no hay una política de producción de empleo, de educación de calidad, luego no conozcan su primer trabajo. Y es ahí donde operan bandas, más chicas, más grandes, transportistas de droga, desarmaderos de autos, que buscan soldados y hasta a veces sicarios. Para eso tienen protección policial, protección judicial, y protección política. Sino seria imposible que lo puedan hacer en la extensión del país y fundamentalmente en la provincia de Buenos Aires.
Bajar la edad de punibilidad es un manotazo de ahogado en varios fracasos que tiene el gobierno, uno de ellos es que ya en dos mandatos Scioli no potencia el Fuero de responsabilidad Penal Juvenil en la provincia de Buenos Aires, que ya existe, y tampoco puso voluntad ni compromiso para la plena aplicación de la Ley de Promoción y Protección de Derechos, que es donde tendríamos que cuidar a nuestros niños y orientarlos con la herramienta más importante que tenemos que es el Estado.
Es lamentable que de la doctrina de ‘los únicos privilegiados son los niños’, representantes supuestos de ese pensamiento hoy digan que estigmaticemos y proponen que las cosas se resuelvan a los tiros, promoviendo gatillo fácil, en definitiva el ‘sálvese quien pueda’ en cada municipio. La propuesta de Insaurralde y de quienes lo asesoraron es de tal irresponsabilidad porque ubican al niño y al joven en situación de vulnerabilidad como el enemigo a perseguir, a encarcelar, a eliminar. Por eso no solo nos oponemos a la baja de edad de punibilidad, sino que proponemos que los debates se orienten a combatir el delito desde una respuesta integral, combatiendo las mafias, desbaratando las complicidades, pero también promoviendo un futuro con trabajo para todos.
Por Adolfo “Fito” Aguirre
Fundador del Foro por los Derechos de la Niñez, la Adolescencia y la Juventud de la provincia de Buenos Aires. Secretario de Relaciones Internacionales de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA)