Esto dijo Antonio Elio Brailovsky, referente ecologista, en la mesa de apertura en la útima jornada de la maratón virtual sobre Alimentación Saludable, Soberanía Alimentaria y Desarrollo Sostenible organizada por la Red de Acción Alimentaria. Brailovsky expuso junto a Dora Barrancos, referente feminista,quien señaló que “la pandemia vino a demostrar la inmensa desigualdad humana».
Ambos abordaron el eje sobre Desarrollo Sutentable y Equidad en un panel moderado por Rosario Hasperué, referente del Foro por la Niñez, que transmitió en vivo a través de la Página de Facebook de la Red de Acción Alimentaria.
Brailovsky comenzó explicando que «hay que poner esta pandemia en el adecuado contexto ambiental», y que hay que plantearse si «la pandemia es un desastre natural, o social. Si consideramos que la pandemia es un desastre natural, las respuestas serán técnicas. Si en cambio el enfoque es social, por la tanto las respuestas serán otras.»
“Esta pandemia – agregó- no llegó en forma sorpresiva, tuvimos muchas advertencias. La causa no es ni sopa de murciélago, ni cosas anecdóticas. La causa principal de esta pandemia es la globalización. Tenemos una circulación de personas que es la mayor de la historia, entre países y al interior de los mismos. La gripe aviar, la fiebre porcina, el ébola, gripe A, son algunas de las amenazas que se presentaron en las últimas dos décadas que nos demuestran la aceleración de los procesos de las enfermedades vinculadas a los modos de producción capitalista”.
En ese sentido, el especialista dijo: «necesitamos políticas que promuevan lazos solidarios, políticas a largo plazo, y una intervención activa del estado en planes y políticas. Se tienen que ser establecer condiciones dignas de vivienda y habitar para todos los seres humanos. Las condiciones en las que vivimos son un factor determinante, especialmente en quienes viven en condiciones de vulnerabilidad, como en la sociedad toda. Es decir, las recomendaciones de que la gente se lave las manos, implica que la gente tenga agua. Las recomendaciones de que la gente se quede en casa, implica que la gente tenga casa», y en esa línea, finalizó diciendo que «el saneamiento de agua tendría que ser prioridad para las políticas de obras públicas».
A su turno, Dora Barrancos señaló que “la pandemia vino a demostrar la inmensa desigualdad humana. A pesar de que el virus iguala a las personas que afecta, impacta mucho más en las personas en condiciones más vulnerables» y que de todas las problemáticas que estas padecen, «el hambre es la situación más indigna de la condición humana».
Desde esa afirmación, la referente dijo: «las mujeres son multiplicadoras de panes. Han tenido que inventar fórmulas y fórmulas para hacer que se multiplicara el mínimo recurso de sus cocinas. Esto es notable. (…) La costumbre nuestra de guisar, implica la costumbre de ir agregando más agua. Y eso es una forma más resolutiva para hacer la comida en casa. Y desde luego esa comida que se está haciendo ahora en emergencia general, está significando aumento de valor calórico, y ademásm efectivamente, tiene problemas de calidad inherente a la diversidad de esa ingesta”.
Barrancos agregó: «De todos modos esas mujeres que hoy multiplican panes, no es la primera vez que lo hacen. Las mujeres han significado un baluarte decisivo en la sostenibilidad de cocina, pero también en enorme cantidad de soporte para los equipamientos públicos, como las pequeñas salas de salud que hay en algunos barrios, entre otras».
Luego, resaltó la brecha salarial entre varones y mujeres en Argentina, mencionando que «la última investigación que tenemos dice que la brecha salarial en Argentina supera el 33.3% diferencial de trabajo que hay entre varones y mujeres, pero notablemente la brecha salarial es mayor al 40% entre las mujeres de menor educación formal”.
En esa línea, Barrancos respaldó medidas de orden re distributivo como el ingreso universal básico, consigna planteada por la CTA Autónoma, el Foro por los Derechos de la Niñez, ATE y organizaciones hermanas del campo popular en el Manifiesto por la Soberanía, el Trabajo y la Producción.
“Parte importante de esos recursos tienen que ir hacia las mujeres. La asignación universal a significado una nota muy debatida entre las feministas sobre una cierta contradicción que se nos plantea respecto de la asignación universal básica».
Después de mencionar los dos ingresos por IFE durante la pandemia como paliativo económico, dijo que “para las feministas es incontestable el significado social que ha tenido el asignación universal por hijo, es fundamental. Pero del otro lado hay que pensar en que la responsable la contraparte: las mujeres de esos hogares son las responsables, entonces hay una cuestión en donde la garantía de cumplimiento pasa por la enorme responsabilidad que tienen las mujeres en el cumplimiento del plan de vacunas, la asistencia escolar, y esas contrapartidas que significan el ingreso universal».
«Hay una cierta inmovilidad – agregó- por parte de la mujer de los sectores populares para participar en el mercado laboral: necesitamos una asistencia más robusta, que tiene que atender además la contraparte: que es el equipamiento social de cuidado. Necesitamos un set que se mantenga la AUH de otra manera: con una asignación de ingreso universal, más equipamientos con kits de cuidado, para que pueda resolverse el ingreso mayor de las mujeres de los sectores populares al mercado laboral».
«Decimos esto porque las mujeres de los sectores populares hacen un fino análisis de la economía que es mucho más ponderado, y más refinado, pero que da el mismo resultado: el análisis del costo de oportunidad que hacen las mujeres de los sectores populares es muy resignado. El cálculo es este: tengo tres hijos, gasto tres horas para ir a trabajar, me pagan tanto: con quién dejó los chicos, quién les hace la comida, y demás, significa que el costo de oportunidad ustedes ya saben cómo rinde. Por lo tanto, las mujeres no es que prefieren quedarse en casa»
Luego expuso que los datos censales «que tenemos para dar cuenta de esta circunstancia, están en una situación llamada improductiva. Se habla de la improductividad de muchísima gente de los sectores populares, lo cual tampoco es verdadero en el sentido de la productividad y productividad porque muchas de esas pueden hacer algunas changas, etcétera, pero este es otra cuestión» dijo Barrancos.
«Las feministas creemos que efectivamente se hace mucho más empinada la vida de las mujeres, porque tienen todavía una cadena de enorme responsabilidad en el área de la socialización primaria. Todavía no hemos conseguido que haya paridad en el ejercicio del laboreo doméstico y demás seguramente» señaló la investigadora.
«Cuando termine la pandemia vamos a hacer algunos estudios donde se demostrará lo que es conjeturable, a pesar de que el confinamiento ha traído a toda la membresía familiar a casa, de la enorme cantidad de trabajo productivo doméstico inexorable que no tiene solución de continuidad. La tarea doméstica no tiene solución de continuidad, porque siempre la estamos haciendo: hay que comer, cocinar, lavar, hay que hacer malabares, un sin fin de actividades que tiene el laboreo doméstico, es lo que alguna vez se llamó trabajo completamente invisible, cuya valoración está alcanzando el 25% del producto bruto interno está generado en eso de algunas esa citas feministas han llamado el verdadero modo de producción que hoy sostiene inexorable mente al modo de producción capitalista. ¿Qué pasaría si las famosas amas de casa llamadas improductivas que no constan en el orden de la valoración productiva hicieron una huelga general por tiempo indeterminado? el mundo efectivamente se paralizaría» expresó Barrancos.
Finalmente, la referente del feminismo dijo que van a acompañar «con mucha fuerza todas las medidas que tiendan a resolver con más dignidad la situación de las familias de sectores más vulnerados de derechos, especialmente en aquellos hogares donde hay una mujer. Ya que aunque mejoremos mucho la situación laboral, las mujeres van a seguir teniendo mayores obstáculos para ingresar al mercado laboral, después necesitamos que la asignación universal se libere un poco de esa supra responsabilidad de ser las que efectivamente la demora del mercado laboral. Necesitamos que el estado resuelva medidas de contención sobre todo en los sectores populares».