Luego de una tensa vigilia en el predio, motorizada por la CTA regional La Plata-Ensenada y el Foro por los Derechos de la Niñez y Juventud, fue suspendido el desalojo del asentamiento “Colinas del Sol”, ubicado en 141 desde 472 a 478 en la localidad platense de Gorina. Allí viven alrededor de 150 familias con 400 niños que en algunos casos llevan más de 20 años en el lugar, y estaban siendo hostigados por la policía desde hace meses para que lo abandonen. Una orden judicial ordenaba el desalojo con el uso de la fuerza pública a partir de las 0 hs. del miércoles, pero finalmente fue dejada sin efecto gracias a la organización popular.
Se trata de terrenos fiscales por los que pasaba el viejo ferrocarril provincial y pertenecen a la empresa Ferrobaires, que al menos hasta diciembre de 2008 no había realizado ninguna denuncia por ocupación. El asentamiento es lindero con un importante barrio privado y desde hace un tiempo se están construyendo lujosas residencias particulares calle de por medio, así que muchos pobladores atribuyen la medida a una fuerte presión de estos “nuevos vecinos” con importante peso socioeconómico en la ciudad para expulsarlos y transformar el barrio en una zona exclusiva, sin cabida para los sectores populares.
Según Emilia Preux, referente del Foro por los Derechos de la Niñez en La Plata, “aparentemente hubo un pedido a principios de febrero hecho por el Ministerio de Infraestructura de la provincia, pero en una comunicación el Jefe de Gabinete no sólo lo negó sino que aseguró que esa cartera no está para nada de acuerdo con la medida”. Hasta el momento no se conocen más detalles de la causa porque el juzgado a cargo del Dr. César Melazo le ha negado a los abogados dela CTA el acceso al expediente.
Pero Preux destacó que “aún si ése fuera el caso, estamos ante un caso de evidente discriminación hacia estas familias, ya que el barrio privado está exactamente a la misma distancia de las viejas vías y a ellos no les pidió el desalojo nadie”.
“Lo más importante es la organización”
Vecinos y militantes dela CTA,la Juventud, el Foro y el Movimiento Barrios de Pie permanecieron todo el día y la noche alertas en el lugar. Desde hace meses la policía venía llevando adelante una fuerte política de amenazas y hostigamiento hacia la gente, cortándoles la luz y el agua, ejerciendo distintas presiones por las que varias familias terminaron desarmando preventivamente sus casas y abandonando el predio ante la posibilidad cierta de represión. Sin embargo, con la aparición en escena del Foro yla CTA, una intensa tarea de difusión mediática, asesoramiento legal, gestiones políticas y desarrollo de organización popular, los móviles policiales se fueron retirando, limitándose a patrullar esporádicamente el lugar.
Finalmente, desde el juzgado confirmaron verbalmente la suspensión de la medida y la apertura de un espacio de diálogo para buscar una solución acordada con participación de los vecinos, que definieron a sus representantes en Asamblea pasada la medianoche. Ante la ausencia de una constancia por escrito, la vigilia continuó hasta la madrugada sin que se registraran incidentes, más allá de algunos momentos de tensión que no pasaron a mayores.
“Por ahora se suspende el desalojo, pero tenemos muy claro que la amenaza sigue en pie”, explicó Preux. “Y queda un saldo muy importante en cuanto a la organización de la gente. Esperamos ahora que el Estado se haga cargo y les garantice a estas familias el derecho a la vivienda, que es una obligación constitucional de la provincia”. En la misma línea, la referente del Foro por los Derechos dela Niñez también reclamó “definiciones y acciones por parte del Ejecutivo Municipal, que hasta ahora viene siendo el gran ausente”, y adelantó que “en tanto no se dé una respuesta se van a promover acciones dentro del Municipio”.
Por Carlos Fanjul.