La resolución N°956 del Ministerio de Seguridad que autoriza a las fuerzas de seguridad federales a prescindir de la advertencia de «alto policía» y las habilita para disparar aún cuando el presunto delincuente no esté armado y, aún más, cuando esté en fuga, se construye sobre una versión mentirosa de la realidad. Se sugiere que la Policía se encuentra inerme para defender a la sociedad, porque si usan el arma para defenderse o defender a terceros van a sufrir persecución penal y castigo.
En principio, hay que aclarar que en cualquier circunstancia en que el propio agente o un tercero corran riesgo de vida, cualquier funcionario policial se encuentra autorizado a hacer cesar esa agresión. Así lo autoriza el Código Penal.
Esta resolución amplía el permiso para matar por fuera de los casos contemplados en el código penal, y dado que una resolución ministerial no puede modificar una ley, va en contra del orden de jerarquía normativa que establece la Constitución Nacional.
También es preciso señalar que en la absoluta mayoría, si no en todos los casos, en que agentes de las fuerzas de seguridad se excedieron en el marco del cumplimiento de su deber, y dispararon aún cuando la ley no los autorizaba a hacerlo, matando al presunto delincuente, esos agentes fueron rápidamente absueltos por una justicia complaciente con el abuso policial, que en muchos casos ni siquiera les recibió declaración como imputados para que explicaran las circunstancias en que mataron.
Por eso, no es cierto que frente a situaciones de inseguridad sea necesario aplicar un nuevo protocolo contenido en la resolución. Al menos, no del tenor del que contiene la resolución mencionada.
Se pretende convalidar lo que se ha proclamado y actuado en gestos públicos por el propio Presidente Macri con la felicitación al Policía Chocobar, recibido con honores en la Casa Rosada.
Se convalida homicidios por la espalda como el de Facundo, el niño tucumano de 12 años y tantos otros que se producen a diario.
En todo caso, lo que la resolución del Ministerio de Patricia Bullrich viene a consagrar es un permiso absoluto a las fuerzas de seguridad para matar, prescindiendo de las pautas que establece el código penal, esto es que sea en cumplimiento del deber o en la defensa de un legítimo derecho proporcional al que se lesiona con la actuación policial.
No es el único gesto. Los redactores del proyecto de nuevo Código Penal ya avisaron que la reforma va en línea con la cuestionada resolución.
Los gestos a la Policía y este tipo de reformas confrontadas con la ley y la Constitución son un cheque en blanco para el gatillo fácil y pretenden garantizar a las fuerzas de seguridad que sin importar la arbitrariedad que cometan, nadie va a detenerse a analizar su responsabilidad.
Por todo ello, REPUDIAMOS LA RESOLUCION N°956 y EXIGIMOS SU INMEDIATA DEROGACION.
Foro por la Niñez
